OBJETIVOS: Revisar nuestra experiencia MÉTODOS: Analizar las hemipelvectomías realizadas en nuestro Servicio en un periodo de 15 años.
RESULTADOS: De 48 hemipelvectomías, 12 fueron hemipelvectomías internas, 36 externas. La recurrencia local para hemipelvectomías internas fue del 0 % para hemipelvectomías externas 8,3 %. La sobrevida actuarial a 5 años fue 38 % y 20 % para hemipelvectomías internas y externas respectivamente. Se registró un 58 % de morbilidad para hemipelvectomías internas siendo la infección de la herida operatoria y la necrosis del colgajo las primeras causas. Las hemipelvectomías internas tuvieron 34 % de morbilidad, siendo más frecuente la infección en herida operatoria. De 12 hemipelvectomías internas realizadas 11 fueron por tumores óseos, y una por tumor en tejidos blandos. El 50 % de los pacientes con tumores óseos se clasificaron en estadio IB. 65 % de los sarcomas de partes blandas fueron estadios III y IV. Los tumores óseos se localizaron más frecuentemente en fémur (55,50 %), el compartimiento anterior del muslo fue la localización más frecuente de los tumores de tejidos blandos (45 %). Los tumores óseos fueron mayoritariamente osteosarcomas. La neoplasia de tejidos blandos más frecuente fue el fibrohistiocitoma maligno.
CONCLUSIONES: Las hemipelvectomías externas constituyen un procedimiento quirúrgico de considerable morbilidad, indicadas para una minoría de pacientes con tumor localmente avanzado. La hemipelvectomía interna está indicada en tumores del hueso pélvico o fémur proximal sin invasión vascular, mejorando la calidad de vida en pacientes jóvenes con sarcomas óseos.