La lucha contra el cáncer, en su sentido más amplio comprende, según la definición de un comité de expertos de la Organización Mundial de la Salud, “una serie de medidas fundadas en los conocimientos adecuados sobre prevención, localización de casos, diagnóstico, tratamiento, asistencia ulterior y rehabilitación, encaminadas a reducir de manera apreciable el número de casos nuevos, a aumentar las curaciones y a limitar los casos de invalidez”. Todos los servicios hospitalarios y por consiguiente todo el personal médico y paramédico del hospital debe actuar en función de pesquisa del cáncer, para lo cual, se ha de hacer énfasis con cada paciente en la anamnesis, el examen físico y las exploraciones clínicas de cada especialidad. El tratamiento de un paciente con cáncer, a nivel del Hospital General, dependerá muy estrechamente de las facilidades disponibles. Sin embargo, de una manera general, es aceptado el concepto que, el tratamiento de los enfermos de cáncer debe ser planificado por un equipo multidisciplinario, el cual, está formado básicamente por el cirujano oncólogo, el radioterapeuta, el internista, el patólogo, además de los otros especialistas del hospital, quienes tengan relación con el paciente. Es de hacer constar que un hospital general, de carácter regional, debe disponer de facilidades de tratamiento con radiaciones, cuando su área de influencia sea sobre una población de 1 000 000 de habitantes, en la cual la incidencia de tumores malignos fuera de aproximadamente 200 por 100 000.