Los datos actuales apoyan el papel clínico de las pruebas de alto riesgo de VPH ADN en combinación con la citología de base líquida para la detección del cáncer cervical y sus precursores, preexistentes o posteriores. El adecuado uso rutinario de la tecnología molecular para la detección y tratamiento de las mujeres en riesgo de carcinoma cervical debería centrarse en las mujeres con infección por VPH persistente y sus complicaciones (HSIL / CIN y cáncer), con claras normas de tratamiento y programas educativos para los proveedores de asistencia sanitaria y los pacientes. Estudios longitudinales son necesarios para proporcionar más información sobre el rendimiento diagnóstico y los posibles peligros de las pruebas de VPH ADN antes de aceptarlo como el estándar de oro para el seguimiento de las mujeres después de la terapia y las infecciones por el VPH latente. El objetivo final es establecer intervalos de tiempo más prolongados y seguros para la pesquisa, como para las recomendaciones ofrecidas. Es de esperar que el dinero ahorrado por el aumento de los intervalos de la pesquisa, se gastarán en la investigación clínica y para la urgente necesidad de campañas de prevención del cáncer del cuello uterino. Esto es lo que ocurre en 471 000 mujeres al año en todo el mundo, alrededor de un tercio de ellas mueren en los países industrializados y dos tercios mueren en los países en desarrollo dentro de los tres años de diagnóstico de esta enfermedad, que puede prevenirse de otra manera.