El mundo de hoy es un universo social, cargado de inquietudes, pero fructífero en esperanzas e ilusiones: sorpresivas contradicciones, que entremezclan lo positivo y lo negativo, para en forma consciente y reflexiva, desarrollar una intercomunicación beneficiosa para el “proyecto del hombre”.
La proximidad de otro siglo pareciera reflejar en forma vertiginosa todas las tensiones y oposiciones que caracterizan el hecho histórico, moviendo las angustias humanas en un mar de creadoras perspectivas. Así, los problemas del mundo social de hoy, son los del hombre, vale decir, los de nuestra existencia, los de cada uno de nosotros. Entonces lo individual y lo social llegan a configurar el devenir histórico de la humanidad. Esta configuración de la vida humana, revela la esencia misma de ella, la naturaleza y la sociedad nos muestra en todo hombre como el centro de ellas. Ese ser, ese hombre, en objeto sin ser utilizado como instrumento, ni aún cuando por una desgracia vital, signifique una carga para la sociedad. El es una persona que siempre tiene derecho a una existencia digna.
La base de la economía de un país reside en la economía del individuo: la fuerza del trabajo, la capacitación y la producción estarán en relación con el capital que representen la salud de su población. La historia nos dice que las instituciones sanitarias y docentes han tenido que crear y ajustar los elementos organizativos conforme al progreso de la ciencia y de las trasformaciones sociales.
Sean válidas tales reflexiones esta noche, con la fuerza del calor humano que cuando nos congregó para proyectar, construir y poner a funcionar este hospital clínico, al servicio de la comunidad, nos reúne para inaugurar el Centro de Medicina Preventiva con sus 2 unidades de Examen Integral de Salud y de Prevención y Diagnostico Precoz del Cáncer.
Su creación viene esperanzada en organizar con criterios actualizados y futuristas el enfoque de esta enfermedad en su mejor fase, cuando no es o es menos dañina a la salud humana y de la colectividad; es decir, prevención y diagnóstico precoz en sus formas de mayor frecuencia.
Los programas y orientaciones para la comunidad a la cual servimos, son resultantes de experiencias acumuladas por hombres e instituciones en las esferas nacional e internacional. En este esfuerzo ha de atribuírsele valor inmenso, a esas experiencias, a la fortaleza de los Drs. Oswaldo García Arenas y Melchor Briceño Pirela y a la concepción y dimensión humana de la directiva de este Hospital, que resume la filosofía de la Institución. Adviértase también en ello que la atmósfera donde se desenvuelve el cuerpo médico del Hospital es cada día más constructiva y favorable: En un aval cuya proyección es imposible predecir.
Las grandes instituciones docentes y hospitalarias dan cada día más importancia a la prevención de la salud. Debemos superar la etapa de cuidar la salud, para adelantarnos en la prevención de ella. Esta será una fase evolutiva obligatoria, en el cuidado de la salud humana. Para ello importa, ante todo, rectificar algunas ideas anticuadas y crear los elementos estructurales para demostrar que en ello esta la base futura de la acción médica.
Hoy entregamos a la comunidad un pequeño elemento, el primero que se desarrolla en un hospital privado. Cabe pensar que en un día futuro la historia dirá si tiene validez el esfuerzo y la ilusión. Nosotros definitivamente, confiamos en los hombres, en sus relaciones entre sí y en su adhesión a Dios.